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sábado, 16 de enero de 2010

Diecisiete velas en mi tarta.

1. Por mi primer paso.
2. Por mi primer sueño.
3. Por mi primer día de cole.
4. Por mi primera ilusión.
5. Por el primer diente que se me cayó.
6. Por el que dije que iba a ser mi marido.
7. Porque ya lo entenderás cuando seas mayor.
8. Porque quiero ser mayor ¡YA!
9. Por mi primera decepción.
10. Porque ya es cifra doble.
11. Porque acabo primaria.
12. Porque jo que mayor me creo.
13. Porque qué bien sienta la tontería.
14. Porque que bonito es el primer beso.
15. Porque como duele la primera ruptura.
16. Porque la vida es para improvisarla.
17. Porque empiezo a entederlo todo...

Autofelicidades to me!!

miércoles, 6 de enero de 2010

Mis propósitos para el 2010:

1. Cumplir todos los propósitos.
2. No rendirme nunca.
3. Ser mejor persona.
4. Ser más constante.
5. Esforzarme más.
6. Reducir los caprichos.
7. Perseguir mis sueños.
8. Poner fuerza de voluntad en todo.
9. Echarme novio.
10. Ser fuerte.
11. Adelgazar (como todos los años...)
12. Que el año que viene no se repitan los mismo propósitos.
13. No llorar si no merece la pena de verdad.
14. Ser más independiente.
15. SER FELIZ

viernes, 13 de noviembre de 2009

La profe de lengua y sus cosas.

Hace dos años tuve una profe de lengua muy peculiar, de esas profes que nunca esperas echar de menos; pero luego siempre te equivocas...
Sí, porque ella era la típica que se ponía muy nerviosa con nada. Sinceramente, sería cosa de la edad, porque la mujer ya estaba mayor. Pero ella quería seguir en la docencia, era lo que la gustaba y lo único que la quedaba de su marido... Porque su marido fue director de mi antiguo cole, era su sueño, el que empezaron juntos y ella no lo quiso abandonar. Aunque al final tuvo que hacerlo, claro.
Así que era una profe de esas que usan expresiones raras, de las que no usa nadie, tales como "dejad de hacer sonidos de ultratumba", "como un elefante por una cacharrería" o "este acueducto aprovechad para estudiar". Estaba un poco loca. Además era muy inocente, así que todos la vacilaban fácilmente. A veces pienso que era consciente, pero que se dejaba... Y era fácil entretenerla en clase, aunque luego nos dejaba sin patio por haberla distraído.
Yo, sinceramente, no la soportaba. Me ponía muy nerviosa su aguda voz, su cabezonería (quizá es porque yo también la tengo), su imparcialidad... Aunque ella a mí me tenía mucho amor. Me llenaba a positivos, y nunca saqué menos de un 8'75 en un examen suyo. A veces me llevaba mal con ella. Otras veces hasta podíamos hablar. Pero lo que nunca me imaginé es que dos años después me fuera a acordar de ella y preguntarme cómo la irá todo.
En realidad era buena gente, con buenas intenciones y nada de maldad. Y con ella aprendí más de lo que me imaginaba. Sobre todo expresiones de la España profunda y que alguno que otro de mi exclase tiene algún trauma infantil oculto.
Y no sé, molaba.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Lo que soy.

Soy un sueño inacabado un sábado a las nueve de la mañana.
Soy una hoja de otoño que se niega a caer hasta que llega el invierno.
Soy los ojos azules más deslumbrantes de la zona.
Soy unas mejillas sonrojadas cuando él está presente.
Soy una sonrisa cálida 353 días al año.
Soy una mirada triste los días nueve de cada mes.
Soy un recuerdo imborrable por cada dieciocho.
Soy una muñeca de porcelana con sentimientos.
Soy una despedida que no quiere decir adiós.
Soy un peluche que está muriéndose por dormir entre sus brazos.
Soy el polo positivo de un polo negativo que aún no ha aparecido.
Soy multipolar.
Soy una niña pequeña que quiere irse de nunca jamás.
Soy una niña mayor que quiere volver a nunca jamás.
Soy una aspirante a princesa.
Soy el dibujo que no quise terminar.
Soy la carta de amor que nunca le daré.
Soy un bolígrafo sin tinta contra un folio en blanco.
Soy incertidumbre frente a miles de dudas.
Soy unos labios que se mueren por besarle.
Soy un montón de besos regalados, desperdiciados y mal empleados.
Soy la textura de aquel primer beso.
Soy el nerviosismo de antes.
Soy la presión de durante.
Soy la felicidad de después.
Soy la inquietud de los próximos cinco minutos en adelante.
Soy una ilusión que aún espera cumplirse.
Soy el deseo que una vez le pedí a una estrella.
Soy ese secreto que saben todos, y el que nadie descubrirá nunca.
Soy un millar de lágrimas empapando mi almohada.
Soy la pereza de los martes por la tarde.
Soy un domingo aburrido en casa.
Soy un espejo que busca su reflejo.
Soy la euforia de un viernes por la tarde.
Soy la risa tonta de un miércoles a las 12 a.m.
Soy una nube con carga eléctrica anunciando una tormenta.
Soy dos billetes de avión que nunca se usaron.
Soy una cabezota invencible.
Soy la ola que nunca se cansa de mojar el puerto.
Soy el pez que siempre lucha contra la corriente.
Soy una media sonrisa desganada cuando él no me habla.
Soy unos ojos inchados después de una noche llorando.
Soy lo que fui de Agosto a Abril.
Soy la que lo daría todo por él.
Soy la que nunca se cansa de intentarlo.
Soy las palabras que he dicho, digo y diré.
Soy, también, las palabras que no he dicho, no digo y no diré.
Soy una bolsa de kinder chocobons.
Soy los gogos que perdí.
Soy un disfraz de carnaval.
Soy una sonrisa hipócrita los lunes por la mañana.
Soy la musa de alguien que no aparece.
Soy un corazón borroso en la mano izquierda después de clase.
Soy los garabatos de una tarde de estudio poco productiva.
Soy los dos segundos en los que nuestras miradas se cruzan.
Soy la alegría que me da su sonrisa.
Soy dos nombres en la puerta del baño de un bar.
Soy un juntos para siempre que no duró lo suficiente.
Soy las promesas que nunca cumplirás.
Soy las promesas que nunca romperé.
Soy un gato que se esconde de la lluvia.
Soy el olor a frambuesa que inunda sus pulmones.
Soy una mente confusa después de un sábado de fiesta.
Soy unos tacones poco usados.
Soy un reloj que se paró un martes a las 17:47
Soy el último pétalo de una margarita que dice "me quiere".
Soy la ilusa que piensa que la margarita lleva razón.
Soy una pompa de jabón entre frágil e indestructible.
Soy el globo que perdí en un parque.
Soy una fecha sin importancia.
Soy una pulsera perdida en el fondo de un río.
Soy el orgullo de no realizar una llamada.
Soy las mariposas en el estómago de cuando estás enamorada.
Soy un libro inacabado.
Soy un poema sin destinatario.
Soy una canción de desamor.
Soy un juego de dos.
Soy tres dobleseis en un tablero de monopoli.
Soy un idioma casi indescifrable.
Soy una caja de bombones autorregalada en San Valentín.
Soy un ramo de flores esperando ser regalado, en San Valentín también.
Soy la luz que busca oscuridad.
Soy el cariño que no sé a quién dar.
Soy la dulzura que desemboca en lo macabro.
Soy un corazón acelerado minutos antes de verle.
Soy un amuleto de la suerte que nunca da suerte.
Soy caos, como una habitación desordenada antes de salir.
Soy el sentimiento que no sabe expresarse.
Soy la frase malentendida.
Soy un fracaso contra una victoria.
Soy un cuento que aún no se ha escrito.
Soy mi propio dialecto.
Soy las luces de un pueblo en fiestas.
Soy el insomnio de después de una peli de terror.
Soy las ojeras de una noche pensando en él.
Soy la curiosidad que mató al gato.
Soy el octavo color del arcoiris.
Soy una proyección de lo que fui.
Soy una versión mejorada de mí misma.
Soy mil experiencias en una.
Soy todo lo que me queda por vivir.

domingo, 4 de octubre de 2009

Lo que me gusta.

Me gusta comer nocilla a cucharadas.
Me gusta jugar con la espuma en la bañera.
Me gusta escribir en el espejo empañado.
Me gusta pintar corazones en el espejo con rojo carmín.
Me gusta hacerme fotos con mi vestido morado.
Me gusta hacerme fotos en general.
Me gusta explotar las pompas de los envoltorios.
Me gusta dibujar las mejores escenas de mi día a día.
Me gusta comprarme faldas de cuadros.
Me gusta cantar y creer que canto bien.
Me gusta improvisar coreografías.
Me gusta saltar en los charcos cuando llueve.
Me gusta comer chocolate después de cenar.
Me gusta dar abrazos.
Me gusta jugar a que soy mayor.
Me gusta jugar a que soy fuerte.
Me gusta comerme el queso de la pizza y dejar lo demás.
Me gusta quitarle el gas a la Coca-cola.
Me gusta mirar por la ventana sin más.
Me gusta el color del otoño.
Me gusta la nieve.
Me gusta coquetear.
Me gusta provocar.
Me gusta tentar.
Me gustan las tentaciones.
Me gusta lo prohibido.
Me gustan los riesgos.
Me gustan los aviones.
Me gustan los pantalones anchos.
Me gusta sonrojarme.
Me gusta ilusionarme.
Me gusta soñar despierta.
Me gusta acostarme tarde.
Me gusta dormir hasta tarde.
Me gusta decir cosas sin sentido.
Me gusta hacer cosas sin pensar.
Me gusta improvisar.
Me gusta imaginarme mi futuro.
Me gusta recordar mi pasado.
Me gusta modificar el día con la mente.
Me gusta entender a las personas.
Me gusta curiosear.
Me gusta jugar a ser pequeña.
Me gusta creer que existen las princesas.
Me gusta creer que hay un príncipe para mí.
Me gustan los peluches.
Me gusta hacer regalos.
Me gusta ver la felicidad de las personas.
Me gusta querer. Y que me quieran.
Me gusta leer.
Me gusta ver películas románticas.
Me gusta jugar a ser la protagonista de una peli romántica.
Me gusta disfrazarme.
Me gusta ir de fiesta.
Me gusta conocer gente nueva.
Me gustan los chicos guapos.
Me gusta pedir deseos a las estrellas fugaces.
Me gusta creer en el destino.
Me gusta (a veces) mi forma de pensar.
Me gustan las tortitas con nata.
Me gusta bailar por la calle.
Me gusta la Plaza Mayor en Navidad.
Me gusta (a veces) la Navidad.
Me gusta pasarme horas en el ordenador.
Me gusta retocar fotos.
Me gusta que lean lo que escribo.
Me gusta (a veces) ser el centro de atención.
Me gusta ponerme filosófica.
Me gusta hacer feliz a la gente.
Me gusta cambiar constantemente.
Me gustan las cosas imperfectas.
Me gusta complicar las cosas.
Me gusta que se preocupen por mí.
Me gusta jugar al chinchón.
Me gusta escuchar canciones cursis.
Me gustan las Jotas.
Me gustan las fechas.
Me gustan los mordiscos.
Me gustan los besos en el cuello.
Me gusta jugar con su pelo.
Me gustan los vaqueros caidos en los chicos.
Me gusta el invierno.
Me gusta el frío.
Me gusta la poesía.
Me gustan los colores.
Me gustan los fuegos artificiales.
Me gustan las miradas.
Me gusta mirar con desdén.
Me gustan las pecas.
Me gustan los ojos oscuros.
Me gustan los gatos.
Me gustan los secretos.
Me gustan las tonterías.
Me gusta dormir.
Me gusta salir.
Me gusta sentir.
Me gusta sonreír.
Me gusta releer Don Juan Tenorio.
Me gusta Tristán e Isolda.
Me gusta llorar en el cine.
Me gusta que llueva.
Me gustan los días nublados.
Me gusta estar enamorada.
Me gusta él.

martes, 7 de julio de 2009

Lo que tengo

Tengo su foto en el centro de mi corcho.
Tengo una carpeta llena de dibujos.
Tengo dos diarios, uno acabado y otro a medias.
Tengo otra carpeta llena de textos.
Tengo un cuaderno con los mensajes suyos que borré.
Tengo dos cajas hasta arriba de recuerdos.
Tengo albúmes de fotos.
Tengo una habitación verde.
Tengo muchos pósters en mi habitación verde.
Tengo un piano sin usar.
Tengo un cajón lleno de gorras.
Tengo un armario que renovar.
Tengo un baúl repleto de juguetes.
Tengo otro baúl cargado de disfraces.
Tengo una piscina que solo se abre en verano.
Tengo un gato que duerme conmigo cuando lloro.
Tengo la nostalgia de un amor que se fue.
Tengo el recuerdo de muchas buenas amistades que se fueron.
Tengo buenas amistades contadas.
Tengo un sueño que cumplir.
Tengo una meta que alcanzar.
Tengo que encontrar mi lugar.
Tengo unos ojos azules que hechizan.
Tengo la canción de mi vida.
Tengo los derechos de autor de mi vida.
Tengo una sonrisa que se esconde detrás de la luna.
Tengo muchas desilusiones tras mis pasos.
Tengo todo lo que no tengo.
Tengo un ordenador.
Tengo inspiración los martes a las dos.
Tengo un corazón roto, mal pegado y resquebrajado.
Tengo un reino en obras por reformas.
Tengo mil ideas que no van a ningún sitio.
Tengo tropecientos textos que nunca verán la luz.
Tengo mil palabras para él, y para ti.
Tengo ego por las mañanas.
Tengo carisma al mediodía.
Tengo envidia por las tardes.
Tengo celos por las noches.
Tengo ira de madrugada.
Tengo un reloj que nunca para.
Tengo hambre cuando me faltan tus besos.
Tengo frío en invierno.
Tengo calor en verano.
Tengo hojas secas en mi jardín.
Tengo margaritas sin pétalos en un cajón.
Tengo una colección de flores entre las hojas de los libros.
Tengo muchas historias que contar.
Tengo mil promesas que cumplir.
Tengo mil promesas que no han cumplido.
Tengo un vaso, y otro, y otro, e infinitos vasos llenos de lágrimas.
Tengo muy pocos remordimientos.
Tengo una vida por delante.
Tengo, por lo tanto, un futuro.
Tengo poca fe.
Tengo algo más de esperanza.
Tengo muy mala hostia.
Tengo mucho orgullo.
Tengo miedo, grandes cantidades de miedo.
Tengo ganas de pegar a alguien.
Tengo todo lo que dejo atrás.
Tengo, por lo tanto, un pasado.
Tengo un presente.
Tengo cosas que no sé lo que son.
Tengo un aspirante a amor.
Tengo mis dudas de que llegue a serlo.
Tengo sentimientos enterrados en mi coarzón.
Tengo una mente cansada de pensar.
Tengo unos dedos ansiosos por escribir.
Tengo unas manos que se mueren por tocarte.
Tengo una niña muy curiosa.
Tengo una vida poco fácil, como todas.
Tengo mucho que decir.
Tengo mucho por lo que debería callar.
Tengo ganas de saltar.
Tengo que desaparecer.
Tengo que aprender a escuchar.
Tengo que dejarme aconsejar.
Tengo que quererme un poco más.
Tengo que poner todo mi empeño en que te quedes.
Tengo que saber si quiero que lo hagas.
Tengo que pensar.
Tengo un sentimiento que no sabe lo que siente.
Tengo una niña que juega a ser madura.
Tengo mil contradicciones mezcladas con paradojas incoherentes.
Tengo un libro de poemas.

Pero de todo lo que tengo, mi mayor tesoro, son los bonitos recuerdos.

lunes, 6 de julio de 2009

Todo lo que tuve.

Echo de menos los disfraces.
Echo de menos jugar en la arena.
Echo de menos los bañadores que solo eran braguita.
Echo de menos las clases desenfadadas.
Echo de menos salir con la bici, o los patines.
Echo de menos salir solo hasta el final de la calle.
Echo de menos pasarme horas en la bañera.
Echo de menos los cuentos antes de dormir.
Echo de menos creer en los Reyes Magos y Papá Noel.
Echo de menos las canciones de Disney como algo natural.
Echo de menos los globos que se escapaban de mis manos.
Echo de menos las mañanas de los domingos en la tienda de chuches.
Echo de menos jugar a Fuga.
Echo de menos a la gente del barrio.
Echo de menos los veranos en aquel campamento.
Echo de menos montar en piragua dos veces cada Julio.
Echo de menos aprender palabras sorprendentes.
Echo de menos la sensación de aquel primer 9.
Echo de menos los vestidos repollo.
Echo de menos los calcetines agujereados y los tomates en los calcetines.
Echo de menos jugar a mamás y papás.
Echo de menos los San Valentines dibujando corazones.
Echo de menos dibujar con el punzón.
Echo de menos jugar con la plastilina.
Echo de menos las meriendas en el cole.
Echo de menos jugar al escondite para irnos más tarde.
Echo de menos los “mentirosa” “verdadosa
Echo de menos los “se lo voy a decir a mi mamá”
Echo de menos salir a la pizarra a vigilar.
Echo de menos arreglarlo todo con un “no se vale
Echo de menos encerrarme en casa por no saber perder.
Echo de menos que me dejaran ganar.
Echo de menos los regalices, las gominolas y el pica-pica.
Echo de menos tener ilusión por volver a empezar y aquel anuncio del Corte Inglés.
Echo de menos ir a comprar el uniforme.
Echo de menos los caprichos consentidos.
Echo de menos las lágrimas por nada.
Echo de menos las sonrisas por todo.
Echo de menos los regalos interminables.
Echo de menos que me hagan la vista gorda.
Echo de menos que la culpa sea de la edad.
Echo de menos los dibujos amorfos que siempre recibían un hipócrita “que bonito
Echo de menos los concursos de dibujo, ciencia y literatura.
Echo de menos ser la ganadora y la finalista año tras año.
Echo de menos ir al parque.
Echo de menos tirarme por el tobogán.
Echo de menos jugar con la pala y el rastrillo.
Echo de menos desojar margaritas.
Echo de menos madrugar para ver Las Súper Nenas.
Echo de menos aquel supuesto primer amor.
Echo de menos a la abuela.
Echo de menos decir que Edu era mi novio.
Echo de menos que Edu me siguiera el juego.
Echo de menos que ser orgullosa no importara.
Echo de menos que aquel chico no me dejara en paz.
Echo de menos las clases de música, y de pintura, y de patinaje artístico.
Echo de menos estar en la piscina hasta después de arrugarme más de lo posible.
Echo de menos desear ser mayor.
Echo de menos aquel interminable pasillo.
Echo de menos el miedo al señor Don Juan Ricardo.
Echo de menos reírme de la cuatro pelos.
Echo de menos ir a la zona prohibida.
Echo de menos que nos inventemos cosas de la zona prohibida.
Echo de menos imaginar que soy una mariposa.
Echo de menos idealizar a aquel chico tan mayor.
Echo de menos aquel primer amor supuestamente verdadero.
Echo de menos al verdadero primer amor.
Echo de menos sus besos.
Echo de menos las fiestas de aquel pueblo.
Echo de menos aquella buena amiga que se fue.
Echo de menos aquel primer mini.
Echo de menos aquel concierto en el que le vi, a mi verdadero primer amor.
Echo de menos olvidarme de un supuesto primer amor gracias al verdadero.
Echo de menos superar las dificultades de aquel primer amor verdadero.
Echo de menos a los primos.
Echo de menos ir al pueblo cada Navidad.
Echo de menos las facturas de teléfono inhumanas.
Echo de menos los mensajes ñoños.
Echo de menos las discusiones provocadas.
Echo de menos poder ser celosa.
Echo de menos no tener que controlar mis impulsos.
Echo de menos los “te echo de menos
Echo de menos oír un te quiero.
Echo de menos poder decir te quiero.
Echo de menos no tener miedo.
Echo de menos actuar sin pensar.
Echo de menos no pensar.
Echo de menos soñar con llegar a Hollywood.
Echo de menos la inocencia.
Echo de menos los textos depresivos que dejó su adiós.
Echo de menos maldecirle.
Echo de menos metirme diciendo "le odio"
Echo de menos gritarle "te odio"
Echo de menos decir "lo siento, lo siento, lo siento"
Echo de menos la angustia de un móvil apagago.
Echo de menos sentir que lo he superado, que no me importa.
Echo de menos nuestra esquina.
Echo de menos aquel que pareció remplazar su lugar.
Echo de menos portarme mal para que me dejara.
Echo de menos decir “que te juro que este es diferente
Echo de menos los interminables “te lo dije
Echo de menos caerme y que me levanten.
Echo de menos sus besos.
Echo de menos echar de menos sus besos.
Echo de menos ir al colegio sin dormir.
Echo de menos ser lo que fui.
Echo de menos la nostalgia.
Echo de menos la felicidad.
Echo de menos la magia.
Echo de menos los piropos que buscaban conseguir algo.
Echo de menos pensar que no iban con segundas intenciones.
Echo de menos mandarle a la mierda mil veces.
Echo de menos que me pidiera perdón mil veces.
Echo de menos a todos los chicos que han pasado por mi vida.
Echo de menos a todos los que estaban y se han ido.
Echo de menos como era(s) al principio.
Echo de menos las palabras llenas de ilusiones.
Echo de menos creerme las promesas.
Echo de menos creer(me) que te quedarás.
Echo de menos ponerme roja con tus piropos.
Echo de menos las maldades aposta.
Echo de menos los patios marginada por su culpa.
Echo de menos flotar en una nube rosa.
Echo de menos poder escuchar la que fue nuestra canción.
Echo de menos las largas conversaciones.
Echo de menos las ñoñerías que decías.
Echo de menos irme con una sonrisa a la cama.
Echo de menos levantarme con una sonrisa.
Echo de menos creer que es cierto, que eres diferente.
Echo de menos que pongas de tu parte.
Echo de menos que me hagas sentir especial.
Echo de menos meterme con la gente.
Echo de menos a las TCG.
Echo de menos al Nuevo Centro, y toda su gente.
Echo de menos sentir que te importo.

Echo de menos tantas cosas que podría decir que, a veces, estoy vacía.